La tradición de la "toma del cuadro" de la Virgen del Collado de Santisteban del Puerto remonta al siglo XIII. Según la leyenda, un campesino encontró la figura esculpida de la virgen bajo una campana enterrada. Tras ese descubrimiento se estableció que la aldea de Santisteban debía custodiar dicha figura y se impuso una custodia compartida entre los aldeanos por intervalo de un año en cada casa. La familia a la que le tocaba tener a su cuidado la imagen de la Virgen se denominaría como "mayordomía".
Con el paso del tiempo, y con el fin de no degradar la frágil escultura, se realizó un cuadro de la Virgen que es el que custodian los Santistebeños hoy día, estando la autentica virgen guardada bajo sumo cuidado entre la Ermita del Ejido y la Iglesia de Santa Maria del Collado (patrimonio histórico nacional, se estima su edificación a la misma época, siglo XIII).
La custodia del cuadro se sigue realizando por motivos religiosos e históricos, constituyendo una de las tradiciones rurales mas antiguas de Andalucía así como una de las mas insólitas.